viernes, 12 de octubre de 2012

Alegría predefinida.

He forjado esta sonrisa día tras día, con sudor y trabajo. No te mereces ni mis lágrimas ni mis risas, si no estás para la una tampoco para la otra. No te lo mereces. No me mereces.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡ASI ME GUSTA! ¡QUE SONRIAS! Que se vea la felicidad irradiar en tu rostro y que te ilumine por las sendas de la oscuridad :) ¡nunca dejes de sonreir!