El amor
es la droga más dura que he probado en mi vida:
hago cosas que desconocía de mi
todas las sensaciones y emociones a la vez
como un estallido
de sinsentidos
fuera del raciocinio
que no logro entender.
Trato de hablarme y no me escucho
trato de entenderme y no me reconozco
me caigo y me levanto
me alicato hasta los dientes
y me desnudo.
Es perder la razón
cuando es lo único que he tenido durante años
lógica, dureza:
la armadura.
Y ahora no sé sostenerme en pie
no me entiendo
no sé qué me pasa.
Desconfío
pero voy a ciegas
un vaivén
un desequilibrio...
Me encanta sentir
a la vez que me da miedo
me enamora que esto sea así
pero necesito certezas.
Y así todo el rato
mientras hago cálculos y resuelvo ecuaciones
en la soledad de los días
que nos quedan por delante.
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